Crianza
Maternidad y crianza

Crianza: asignatura que nadie nos enseña

Lo primero que tengo claro es que hay tantos tipos de crianza como niños y padres hay en el mundo. No hay una regla fija ni un manual de instrucciones. Si alguno de vosotros lo tenéis, me lo pasáis.

Cuando sales del hospital con el bebé en brazos, sientes un vértigo que ni te imaginabas que sentirías. La personita que tienes en tus brazos es la mayor responsabilidad que tendrás en la vida. Algunas de las que estáis leyendo esto lo habéis sentido hace poco, ¿tengo razón?

Desde el embarazo, la gente a nuestro alrededor nos pone la cabeza como un bombo y quieren opinar sobre todo lo relacionado con el bebé. Si sois padres, os ha pasado seguro. Se meten en si vas a dar pecho o biberón, en qué hospital darás a luz, si le abrigas demasiado o lo llevas muy fresco, colecho o cuna individual, marca de crema para el culete, de pañales y un largo etcétera. ¿Soy la única que quería mandar a tomar viento a todos? ¡Seguro que no!

Y cuando va creciendo la criatura, la cosa no mejora en ese aspecto. Si no tiene una dicción perfecta, si pesa menos o más de lo que debe, si hay niños más altos en su clase, si usa pañal por la noche, qué pone en el boletín de notas del cole… ¿qué va a poner? ¡Tiene solo 5 años!

Nunca he sido madre de leer sobre crianza, Montessori ni similar. Uso lo que yo considero sentido común. Y cuando tengo alguna duda, pregunto a su profesora o pediatra. Ellas son las verdaderas profesionales, no nuestra vecina del quinto ni el resto de madres del cole, con todos mis respetos.

Cada niño y cada padre tiene unas circunstancias y unas necesidades, por lo que lo que te funcionan a ti probablemente a mi no, y viceversa.

Tenemos la horrible costumbre de comparar, ¡no hay nada peor en la crianza que esas comparaciones! “¿Tu hijo anduvo a los 14 meses? El mío a los 12”, ¿Chupete hasta los 2 años? Yo al mío se lo quité a los 6 meses.”, “¿Duerme en la cama con vosotros? La mía en su habitación desde el año”. ¿Esto es una competición y yo no me he enterado?

Amigos, ninguno de esos niños cumple 18 años usando chupete, bebiendo biberón por las noches, durmiendo en la cama de sus padres ni tomando solo comida triturada. Así que un poquito de relax, por favor.

Como he dicho al principio, la crianza da un vértigo increíble y nos hace dudar en cada decisión que tomamos. Queremos lo mejor para ellos y no tenemos la bola de cristal que nos dice si vamos por el buen camino o no. Y solo tengo 5 años de experiencia, supongo que los que tenéis más estaréis pensando “y lo que te queda”.

Así que dejemos de compararnos con el de al lado, informémonos con quien de verdad entiende del tema y no hagamos caso de lo que nos dicen los demás, porque el padre o madre del año no existe.

Lo que tengo claro es que ser madre, no sé si estáis de acuerdo, es algo que te cambia la vida.

Y no hablo solo de lo típico de estar más cansado, dormir menos, tener más ojeras, menos tiempo para ti, etc. También estábamos cansados cuando salíamos una noche entera de juerga e íbamos a clase o al trabajo de empalme y no nos quejábamos; o dejamos de dedicar tiempo a nosotros mismos por una novia o novio acaparador y nos parecía maravilloso.

El tiempo nos lo organizamos como nosotros queremos, hay una gran parte que se la llevan los peques, obvio, pero el resto del tiempo somos nosotros los que lo tenemos que gestionar y dedicarlo a aquello que nos hace feliz. Porque estando satisfechos, felices y no olvidando nuestro amor propio, les daremos a ellos un tiempo de muchísima más calidad.

Y algo que he aprendido en mi corta experiencia en esto de la maternidad es que no podemos olvidarnos de nosotros mismos, somos personas individuales con aficiones, amistades, pareja, etc, y no podemos dejar todo eso de lado solo por el hecho de tener hijos. Habrá quien necesite su ratito para salir a correr, para ir a la peluquería o para tomar una cerveza con un amigo (ya sabéis en qué grupo estoy), ¡hagámoslo!

Te cambia la vida emocionalmente, llegas a querer de una forma muy bestia, ¡es una pasada! Aprendes a darle importancia a las cosas que de verdad la tienen. Pasas el día con la ilusión de recogerle de la guarde o del cole y verle correr como si llevara meses sin verte para colgarse de tu cuello y comerte a besos (ahora con mascarilla, pero con la misma intensidad). Vas viendo el mundo a través de sus ojos, con una ilusión y una inocencia que ya no recordabas. Sacamos una paciencia que no sabíamos que teníamos cuando en una misma conversación te preguntan diez veces “por qué” o cuando quieren escuchar la misma canción en bucle y piensas que tu cabeza va a explotar.

Puede que alguno de los que me estáis leyendo piense lo contrario, ¡quiero saberlo! Contadme vuestra experiencia.

La crianza y educación de los peques da para escribir largo y tendido. Temas que podemos o no hablar con ellos, emociones que debemos o no expresar delante suya, castigos, premios….

Tenemos mucho que debatir, así que continuará….

4 Comentarios

  • Laura M.

    Sin palabras me has dejado….muy buen post y agradable de leer! Sólo añadiría las frases….y para cuándo el segundo? Le daréis un herman@, no? Si tenéis otro seguido se crían juntos… alguien os ha preguntado?

    En mi corta y humilde experiencia, lo principal es escucharte a tí misma y escuchar a tu hij@, que necesitas y que necesita, tu instinto y el instinto de tu hij@…todo lo demás te tiene que sonar a testimonios jajaja sin darle mayor importancia.

    Últimamente le doy vueltas a las diferencias entre la generación de nuestras madres, nuestra generación y la futura generación de nuestras hijas… sería interesante que hicieses un post de que queremos y que no queremos transmitir…no sé si me explico…

    • Carmen Navarro

      Yo no di tiempo a preguntarme por el hermanito pero sí, la gente tiene obsesión por meterse en la vida del de al lado.
      Una de las cosas de las que quería hablar, y escribiré pronto, es de la diferencia entre la educación que hemos recibido nosotras y lo que queremos transmitirles a nuestros hijos. Educación emocional, temas que en nuestra época eran tabú y veo importantísimo para los niños… en breve segundo post 😘

  • María Atienza

    Totalmente de acuerdo!!! Las injerencias de la gente,las dudas e incertidumbre,todos los miedos del.mundo,las comparaciones…jajaajjaa y qué importante es mantener tu espacio de vida propio y con la pareja!!! Has acertado en todo,prima!!!

    • Carmen Navarro

      Hay que intentar pasar un poquito de la gente y disfrutar de cada día al máximo, siendo coherentes, que pasa muy rápido y se hacen grandes en seguida.
      Y el tiempo para ti y para la pareja IMPORTANTÍSIMO. Trabaja mucho en ello que merece la pena. 😘

Deja un comentario

A %d blogueros les gusta esto: